Sueño que un día cercano superemos la violencia de vivir en privado lo publico.
Sueño que nadie necesite amontonar propiedad privada para sentirse alguien en público.
Sueño que madres y padres no sufran en privado las exigencias de devolver buenos hijes a lo publico; asi, a futuro, nadie tenga que lamentar en privado la incoherencia presente.
Sueño que las necesidades básicas y no básicas de cada ser humano sean asunto público desde lo más privado de cada uno.
Sueño que cada quien exprese en público lo mejor que pueda hacerlo en privado.
Sueño que nadie esté privado de reconocer los beneficios de lo publico -histórico y social- en su propia existencia.
Sueño que les hijes tengan cantidad de padres y madres; como el cielo, las estrellas.
La pandemia y dios.
Escribo
en diálogo con el artículo del Sr José Pablo Feinmann del próximo pasado
domingo 07, “Dios y la pandemia”[1].
Para ser precisa, dialogo con lo que interpreto de su nota, como no puede ser
de otra manera. Es gracias al reconocimiento de la distancia entre lo escrito y
lo que yo interpreto del artículo que puedo otorgarme el ejercicio de la
libertad de responder a la vez que liberar al autor de cargar con la sentencia
de mis interpretaciones. En situaciones comprometidas, por el mismo
reconocimiento de discernimiento entre lo que se me ofrece –digamos buenamente-
y lo que me interesa darme por interpelada, corro riesgos mayores que en esta
ocasión por supuesto, pero ¿Qué mejor que los riesgos a correr resulten de la
elección propia a que por intenciones ajenas sobre una? ¿Acaso por mis haceres
o inhaceres, más temprano que tarde, no seré yo quien responda por mí y no
otro? Quizá no elija las circunstancias que me rodean en muchas ocasiones, es
cierto. Más en el entrenamiento de la propia libertad, por pequeño ejercicio
que parezca, las circunstancias, dinámicas, se van ampliando –como nos muestra
la historia social y personal- a la vez que nos permiten mantenernos en forma
para remontar vuelo cada vez más fácilmente si hiciera falta, sino cómo…? Pero
este aparente largo preámbulo no se trata de una excusa anticipada ni mucho
menos; es parte constitutiva de la respuesta del texto en mí. Nos cuenta
Feinmann: “En la foto se ve a una mujer de rodillas que apoya sus manos
entrelazadas contra una alta y fuerte puerta de madera cuidadosamente tallada.
Tiene la cabeza baja, los ojos cerrados y algo está diciendo. ¿Qué es lo que
dice? No lo sabemos, pero se ve claramente que está rezando. La puerta es la de
una catedral y está cerrada. Como están cerradas también las iglesias. Es por
la pandemia. La gente no puede aglomerarse en las casas de Dios porque puede
contagiarse el virus que cruelmente azota el planeta”. Puestos a mirar, la mujer
de la imagen textualizada por Feinmann parece haber corrido el mismo riesgo que
una. La mujer fue hasta la puerta de alguna catedral pero “le han cerrado
las puertas de la casa de Dios y ella igualmente reza” . Evidentemente no
necesitó que alguien abriera la puerta para hacer lo que había ido a hacer.
Quizá es lo que vino a demostrarle esta pandemia: El discernimiento necesario para,
a pesar del infortunio o por ello mismo, hacer lo que quiere, de acuerdo a su
propio deseo –sin perjudicar a otres-. Si era rezar, pues bien, rezó. Como es
lógico, una cosa es la “casa de dios” y otra dios.
Más adelante, como el
autor sabrá mejor que yo sin duda, enumera temas ampliamente debatidos por la
historia de la filosofía, la filosofía e historia de las religiones, la teología
y teodicea (problema del mal, ira de dios, castigos divinos, justicia divina,
existencia y naturaleza de dios, origen del universo)[2],
sin que por ello se haya llegado a nada. No, a nada no, corrijo. Sin llegar a
una respuesta definitiva y hegemónica. Esa es en sí respuesta: en cuestiones
trascendentales, la dualidad, definitiva y hegemónica, no existe. Si hay uno,
tiene que haber dos porque uno sin dos no es uno; uno sin dos es Todo porque no
hay otro simplemente. Si es Todo puede ser un todo de uno, de dos, de infinitos
o un todo de nada. Uno necesita de otro para ser Uno. Por ello no es posible
afirmar Uno -como absoluto- sin negar, por hoguera o imposición, la otredad, su
voluntad. Guste o no, cada quien somos Uno; el universo de identidades se
amplía. La omnipotencia de uno termina donde empieza la del otro, sino, es
abuso. Tal el dilema al que nos enfrentamos: les otres existimos y somos
“muches más que Dos”; además, discernimos. Evidencia suficiente y clara: la
dualidad es una falacia superada; irreal. Asimismo la dialéctica planteada
Ciencia y Religión, Razón y Fe también es falaz[3].
De igual manera lo es la pretensión absolutista y exclusivista de querer hacer
depender de alguna organización religiosa la (buena) Fe y la evolución del
Espíritu Humano como si Fe y Espíritu no fueran potencia intrínseca a la condición
humana. De hecho “¿Podría la Ciencia haberse sostenido sin la fe?”
[4]
Hay una fe en la vida y hay otra fe que dice “¡la ciencia destruirá a
nuestro mundo!” [5].
Pero para Feinmann, que es un buen filósofo agnóstico cientificista positivista,
¡La ciencia salvará al mundo! “Son cientos de miles los científicos que –a
lo largo y ancho del mundo- investigan para conseguir una vacuna salvadora”
nos dice. Será que los científicos trabajan con fe, porque ¿Sirve acaso a la vida la derrota
anticipada del escéptico? [6]
Sin ir muy lejos, yo
misma soy testimonio de la dualidad superada[7].
Como Lic. en Teología y
Religiones Comparadas no
milito el binomio teísmo - ateísmo. No me gusta militar. ¡Que la gente piense
lo que quiera! Prefiero conversar con otros, bucear sobre nuestras percepciones
y representaciones, ayudarnos a afilar mutuamente el discernimiento entre lo
que, por ejemplo, una organización religiosa dice y hace y lo que nosotres
queremos decir y hacer. ¡Quien no quisiera un buen discernir para sí y sus
seres queridos! Cuántos males nos evitaríamos. Porque si, según mi apreciado
interlocutor, “Los sacerdotes no dicen mucho y si dicen algo es lo mismo de
siempre, lo previsible” ¿Importa? Importa qué queremos escuchar, si
queremos escucharlos. Es que de decirse únicos representantes de un dios omnipotente
para ungirse de un poder de autojuzgarse y autoindultarse por los siglos de los
siglos, podría ejercerse como apología del abuso sobre nos-otres; y eso sí
sería peligroso, más peligroso que la pandemia del Covid 19.
El dualismo es un torpe
error de cálculo. Esconde, más o menos groseramente, un ansia de poder subsumir
la otredad. El yo-tu (ustedes) queda prácticamente obsoleto frente a un
nosotres universalizado por primera vez en la Historia, religados como estamos por
una patética pandemia mundial,,,por ahora. Si como dice el filósofo “(…) los
habitantes de este planeta no esperan mucho de Dios. (…) creen más en una
vacuna salvadora que en un milagro divino”, podemos darla por hecha, es
cuestión de poco tiempo. A pesar de la angustiante situación pandémica
–y de otras previas, lamentables, de muy larga data- podemos discernir que los
habitantes de este planeta ya incursionamos en la transformación de nuestra
propia naturaleza, cambiamos nuestros órganos, intervenimos en la química
cerebral, fecundamos in vitro, manipulamos genes. Encontraremos la salida como
ya hemos hecho desde los anales de la historia humana y seguiremos haciendo. No
lo dudemos. Lo verdaderamente divino sería que, a mi juicio, mientras los
científicos trabajan sin escepticismos, con fe en hallar salvación, les otres nos pusiéramos coherentemente, con el mismo tenor que pretendemos de ellos, hasta encontrar la lucidez que nos permita discernir de una buena vez que “el
bien de unos pocos acaba en el bien de nadie”. A ojos del filósofo, la pateticidad de
la figura de la mujer frente a las puertas cerradas de alguna vieja iglesia se
transforma en “envidiable”; es que, nos cuenta, ella “Ha
construido a Dios en su corazón”. De ser así, concilia mi teología con el filósofo, es cierto, es envidiable:
Ella ha construido.
[1] “Dios y la pandemia” JP Feinmann, 07 de junio 2020 (https://www.pagina12.com.ar/270740-dios-y-la-pandemia)
[2] Faltó para mi
sorpresa la visión apocalíptica de Jose Pablo Feinmann
[3] Intropandemia se intentó sumar en Argentina la división “Salud y
Economía” pero fue abortada oportunamente por el propio Presidente para el bien
de todes. Respecto a la aprobación de la Ley IVE (interrupción voluntaria del
embarazo) se ofrece un análisis religioso en el artículo de mi autoría ABORTO
SI. ABORTO SI.
[4] Silo. Obras
Completas I. Humanizar la tierra. Vol. I. Mexico: Plaza y Valdes (pág. 25-159),
2002 [1972].
[5] idem
[6] idem
[7]Humanista Universalista. Lic. en Teología y Religiones
Comparadas (UNLaR). Diplomada en Historia y Filosofía de
las Religiones (UNED. España) Como cuarta egresada del país de una Universidad Nacional, por tanto Laica, en Argentina aún, a diferencia de otros países donde los estudios de
teología y religiones comparadas llevan una larga tradición académica, encuentro
restos dualistas por prejuicios entre militantes ateos y teístas. Para algunos
por Teóloga, para otros por no dogmática.
ALPA
Silo, en el cuento "El día del León Alado" (Silo, El Día del León Alado 1991), ejemplifica la praxis de la teoría de "Psicología de la imagen" expuesta formalmente en su Obra "Contribuciones al Pensamiento" (Silo, Contribuciones al Pensamiento 1990) . Allí, el modelo ejemplar es aplicado, tal como en el caso de la reciente publicación de la agencia internacional BBC (BBC 20 julio 2019) , a la pedagogía deportiva. La metodología pedagógica no implica de ninguna manera exclusividad disciplinar por supuesto, por ello mas significativa la coincidencia.
Hemos visto tantos salieris que sabemos que no faltaran quienes intentarían hacer un ensayo de esta relación que expongo como si se tratara de un descubrimiento de ellos con el fin un tanto sinuoso de ser reconocidos como intelectuales de algún tipo, no les importa cuál (por algo será la compensación) En verdad, intentar nimbarse de propiedades ajenas es un tanto ridículo además de retrógrada. Tampoco les importa pero es necesario decirlo. Por qué no? El mundo ya cambió. El conocimiento es colectivo. No existe ninguna posibilidad de sanarse solo.
A modo de conclusión, invito a releer un párrafo significativo de la narración central homónima al título de la obra de referencia, "El día del Leon Alado". Una vez que los lúcidos miembros del "Comité..." han logrado hacer lo que se han propuesto -comunicar a otros las imágenes del León Alado- todo lo demás es una estupidez.
–El Comité para la Defensa del Sistema Nervioso Débil. Nadie los recuerda, por eso les he dedicado un poema."
Bibliografía
BBC. ¿Puede una técnica psicológica ayudarte realmente a triunfar en la vida? Sección Mundo: https://www.bbc.com/mundo/noticias-49018582
Silo. Contribuciones al Pensamiento. Buenos Aires: Planeta, 1990.
—. El Día del León Alado. Buenos Aires: Planeta, 1991.
Espíritu
Una mañana, como todas las mañanas de todos los días, iré a trabajar. Esa mañana, como ninguna mañana de ningún otro día me veré a mi misma yendo a trabajar. Será como ningún otro ayer. Como vivir el mañana hoy. Me veré a mi misma como nunca antes me había visto. Verme viendo como quien ve que está soñando. Verme viéndome caminar. Viéndome caminar me veré preguntarme a dónde voy. Me veré girando sobre mis pies. Me veré caminando a verme viviendo paisajes nuevos, nunca vistos, jamás soñados. Veré que no soy la única aquí. Veré que otras miradas nos estaremos viendo como ninguna mañana de ningún otro día hasta hoy. Veré que giraremos sobre nuestros pies. Nos veré volviendo a casa, andando hacia las plazas y los parques. Nos veremos viendo los colores, las distancias, las luces y sus sombras en el reflejo infinito de las pupilas mutuas. Veremos que nada ha cambiado, que todo es distinto. Nos habremos visto viéndonos; será como haber existido a partir del día de la mañana
ABORTO,
SÍ. ABORTO, SÍ. [1]
La pregunta acerca del origen, la naturaleza y el
sentido del mal, es, sino la pregunta más antigua de la humanidad, una de las
primeras. Antigua como los intentos de reflexión
sobre la injusticia, el dolor y el sufrimiento humanos. Pero antes que nada, valga una
aclaración necesaria entre tantos males: la pregunta acerca del mal así como
una tentativa de respuesta, no es materia exclusiva ni de un sector religioso
ni de una época determinada; por supuesto, menos restringible lo es al lapsus
de los últimos 2000 años. Sólo tener en cuenta que las huellas más antiguas
encontradas del Homo Sapiens van de los 200.000 a, según el paleoantropólogo
francés Jean-Jacques Hublin (1953- ), los 300.000 años y que los rastros más
antiguos de arte datan de 75.000 años.
Siendo la cuestión del mal una pregunta
intrínseca al ser humano, tan vigente para muchos como sorda para otros a pesar
del repiquetear de los primeros, vale exponerla sobre el tapete o, si se
prefiere, sobre la superficie del consciente; si colectivo, mejor.
Aun la variedad de teoréticas respuestas
propuestas o impuestas por diversas facciones legalistas a lo largo de la traza
temporal, el asunto acerca del origen, la naturaleza y el sentido del mal,
continúa irresuelto.
Por otra parte, adentrándonos en nuestro tema, la ciencia biológica
afirma en la voz clara del Dr. Alberto Kornblihtt que “el feto no es un ser
humano”, que “vida” no es igual a “vida humana”, y que, continúa aclarando, aunque la biología define “vida” como “referida sólo a las células (…)” no
define “vida humana” in stricto sensu [2] [3]. Por ende, en el original mundo universalizado
en que nos toca tratar de vivir y convivir, no existe respuesta taxativa al
problema del mal como no la hay a la definición de “vida humana”. En sentido opuesto,
sí se logró alumbrar la causa de la gestación intrauterina. Ni demonios ni
espíritus, sí posesiones. Es que factores sexocarnales en determinadas
condiciones, dan gesta a la fecundación de un óvulo alcanzado por un
espermatozoide. Gesta embarazosa si las hay, puesto que desde el inicio de los
tiempos, entonces sea por milagro o por castigo divino, para llegar a buen término, es decir, para llegar a expulsarse
del útero un cuerpo con vida independiente del primero que lo contenía, debió primero
el primero, lograr sortear males menores y males mayores. Cientos de males
durante cientos de miles de años lograron paliarse bien avanzada la Ciencia, la
Tecnología y la Justicia Social del SXIX; Justicia Social que, no es moral
pasar por alto, deja mucho que desear del
ya mayorcito siglo XXI.
Si, en principio, por carencia de Justicia
Social la verdadera “pesada herencia” -epistemológica, científica y
tecnológica- resulta insuficiente para evitar los males mayores de un embarazo
no deseado ¿con qué argumento coherente el Derecho podría pretender penar a
alguien que, nadando entre males, decide el mal menor para sí?
En cuanto religioso, en tanto se presenta
como argumento en el debate cívico que nos ocupa, condenar en nombre de Dios a
quienes quieran optar por la interrupción voluntaria del embarazo porque consideran
que la vida celular no está por encima de la evidente “vida humana” -evidente por
sí en cuanto está exigiendo ejercer su libertad y sin por ello imponer a otros el
hacer uso del obligado derecho al aborto- pone de manifiesto una gran
contradicción a la vez que denuncia la falacia de su propio argumento. ¿Cómo cabría imponer una visión particular al conjunto social cercenando el derecho al derecho sin ejercer con ello la negación de su propia afirmación? Porque, para
decirlo sintética y un tanto teológicamente: si lleva el signo de la imposición
y la violencia, entonces, no viene de Dios. Igualmente, si tan breve pero
contundente sentencia teológica no fuera suficiente, permítaseme invitar a
contemplar para su bien, a los ciudadanos cristianos, supuesta mayoría religiosa en
nuestro país, las verdades teológicas en sus propias fuentes por intermedio de
la lúcida exposición de la Teóloga y biblicista, Magistra en Sagradas
Escrituras, María de los Ángeles Roberto[4]. Frente a la Cámara de
Diputados ella expresa que: “(…) en ninguna página de la Biblia hay condena
para el aborto porque el aborto no era considerado ni pecado ni crimen dentro
de la ley mosaica ni en el período neotestamentario. Tampoco hay un momento
determinado para indicar el comienzo de la vida humana en la Biblia”. Es decir,
pueden existir opiniones, interpretaciones, por supuesto; pero sin fundamento
real en la Revelación, no existe tampoco fundamento real para un dogma, en este
caso, antiabortista.
La única salida saludable y coherente para
quien pregona a creyentes y no creyentes, la imposición de la no opción -entre
males-, es la de trabajar por conquistar una genuina Justicia social, hasta que
nadie, ni une sole, creyente o no, quedara excluido del gozar de ella. Mientras
tanto es sumar injusticia pretender imponer que la prójima -sin embargo,
siempre desconocida- no reciba un tratamiento justo en una situación, ya de por
sí, injusta; es decir, que no reciba con beneplácito, amplia y
satisfactoriamente las bondades de las artes, ciencias y oficios que el estadío
actual del desarrollo humano ha alcanzado más que no ha cumplido en hacer
llegar a todes sus herederes, aun, incluso cuando haya llegado a la prójima en
cuestión más no, siquiera a une sole, a su alrededor. Porque como ser histórico
y social el ser humano construye y aporta activamente al entramado social del
que también se beneficia para su propia construcción[5].
Por otra parte, si el aborto es provocado
“naturalmente”, es decir, no inducido por
intencionalidad de la poseedora del cuerpo gestante[6], ¿quién sería
responsable?, ¿la naturaleza?, ¿Dios? En estos casos no solo no hay condena
material, tampoco la hay moral o psicológica o, por qué no, espiritual, puesto
que nadie exige a nadie, ni a sí mismo, el hacerse responsable buenamente de
las consecuencias que se echan a rodar de todas maneras. Una comprensión
profunda sobre la trascendencia de los actos se orientaría a enderezar
justamente los caminos que, pareciendo lejanos entre sí, habrán de cruzarse,
sin duda, en el entramado histórico-social. Que estos caminos estén libres de
piedras depende en gran medida de la intelección vívida de la significación de
“Vida Humana”; pero éste es otro tema que será necesario profundizar en un extenso
trabajo aparte. Volviendo al punto, de frente al imponderable del aborto
“natural” suele expresarse que “si fue así, es porque Dios lo quiso”. A lo que
cabe indefectiblemente preguntar ¿Al fin se responde a la vieja cuestión sobre
el origen del mal? ¿Es el Dios responsable de lo que llaman mal?
Para muchos, que el Dios permita un
aborto “natural”, supone la confianza plena en su omnisciencia y omnipotencia
pero sobre todo en su “gratuidad”. Lo que no queda claro es ¿por qué no supone
la misma confianza en el mismo Dios que la prójima haya decidido la
interrupción del embarazo que gesta sin querer como un mal menor y, además, que
un Estado, más o menos justo, lo garantice sólo por intentar ejercer la
imitación del bien mayor?
Lo anterior lleva a inferir que el único
problema del mal de la opción al aborto libre, seguro y gratuito, no es en
definitiva el problema del embarazo interrumpido sino Quién ejerce, con o sin
justicia, con o sin moral, el Poder de decidirlo y el Poder de hacerlo;
cuestión que, en los tiempos que corren –para atrás, por simple inercia- significa
quién lo pagará. Porque por lo bajo y a oscuras, valores agregados, son pocos
los que tienen el Poder de pagar. En realidad, en el entramado “histórico-social”,
pagar lo pagamos todos, solo que algunos lo pagan con dinero, que es lo que
cuenta. El resto lo paga, sí, con “Vida Humana”. Eso diferente de vida celular que
la ciencia no puede definir y que, por ahora, ignoramos su valor.
[1] Humanista. Lic. en Teología y Religiones Comparadas.
[2] Refiero a la exposición magistral del Dr en Ciencias Químicas y Biólogo
Alberto Kornblihtt del 31 de mayo de 2018 en el 15º plenario de comisiones del
Congreso de la Nación Argentina por la legalización del Aborto en Argentina. El
Dr Kornblihtt expone que: “un embrión no es un ser humano” ”El embrión y el
feto no son seres independientes de la madres sino que hasta el nacimiento son
como un órgano de la misma” “(…) la persona humana comienza con el nacimiento
con vida es decir cuando el bebe se separa completamente de la madre”
[3] Refiero a la caracterización de “vida humana” en “Cuarta Carta a mis
amigos” M.
L RODRIGUEZ COBO, SILO, Obras Completas I. Cartas a mis amigos. Buenos
Aires: Plaza y Valdes, 2004 [1993], p 553
[4] Refiero a la erudita exposición del día 17 de abril de 2018 en sesión del
debate público por la despenalización del aborto frente a la Cámara de
Diputados de la Nación Argentina. Cabe destacar que la Magistra Lic. Mº de los
Angeles Roberto, estudia el texto bíblico en sus idiomas originales, el hebreo
bíblico y el griego koiné.
[5] Refiero al estudio de “Historia y
Temporalidad”. M. L RODRIGUEZ COBO, Silo, Contribuciones al
pensamiento, Discusiones historiológicas, CAP III, Historia y
Temporalidad. Buenos Aires: Plaza y Valdes, 2004 (1990) , p 272
[6] Disculpas por el uso del género femenino. Se debe a una cuestión
simplemente gramatical y de facilidad de lectura para un texto de por sí un
tanto comprimido.
Acá, en el futuro
Quiero vivir en el futuro
y Voy a vivir en el futuro
Donde la desobediencia no sea calumniada ni premiada.
De dónde sacar tantos trofeos?
Voy a vivir en el futuro
Donde el patriarcado, con pantalón o con pollera,
caiga como abono de la buena convivencia.
Voy a vivir en el futuro
Donde los viejos jerarcas de siempre ya no puedan,
ya no sepan, ya no quepan
Voy a vivir en el futuro, Si.
Donde a nadie se le ocurriría ni un minuto
aprovecharse del instante de otro
para tratar de Ser, en vano, lo que No Es.
Voy a vivir en el futuro
les guste o no
a los poderosos que no pueden
Voy a vivir en el futuro
porque en el futuro será historia la revancha
Voy a vivir en el futuro
con gente que no miente ni esconde
porque no teme
Voy a vivir en el futuro
porque la única competencia
no será cuántos lo aplauden
ni cuántos lo soban
La única competencia, si la hay,
acá, en el futuro,
es para encontrarnos en las miradas
ufffff
radiantes como miles de soles
y ver cómo hacemos, entre todos,
para que cada uno
Sea
Julio 2018
De la colección "Aportes al discernimiento":
Mujer no es madre,
feminismo no es revancha
ni justicia la venganza
Obediencia no es bondad
Desobediencia muchas veces sí.
Matrimonio no es amor
Ni amor es matrimonio
Rico no siempre es abuso
Violación es violación
Negra no es puta
Pobre tampoco
Masculino qué es?
Dinero no es felicidad
Difamar no es gratis
Ni hijos, realización
Simpatía no es invitación
Pobre no es ladrón
Escuela no es educación
Modernidad no es bienestar
Ni Dios es religión
Agradecimiento, eso si que es Alegría!
feminismo no es revancha
ni justicia la venganza
Obediencia no es bondad
Desobediencia muchas veces sí.
Matrimonio no es amor
Ni amor es matrimonio
Rico no siempre es abuso
Violación es violación
Negra no es puta
Pobre tampoco
Masculino qué es?
Dinero no es felicidad
Difamar no es gratis
Ni hijos, realización
Simpatía no es invitación
Pobre no es ladrón
Escuela no es educación
Modernidad no es bienestar
Ni Dios es religión
Agradecimiento, eso si que es Alegría!
Veo? luego existimos.
Cada quien ve con sus ojos. Con los propios. Tan válido unos como tan válido otros. Cómo es que podría pretenderse que miren otros con los de uno. Raro, no?
Mas claro: habría que ver con los propios, con los que pretendemos que el otro mire, al otro, con sus ojos, los propios de él, entonces, aunque parezca un trabalenguas, sería una ciega contradicción. La contradicción de ver que el otro tiene sus propios ojos y no mirarlos.
Pretender que otro mire con los ojos de uno y no pretender que uno mire con los del otro, hilando mas fino, al menos, una segunda contradicción.
Qué manía acaso es esa? Si veo bien, veo que el otro tiene sus propios ojos. Entonces, fácil. Puede usar los propios. Los suyos. No necesita los ojos de nadie. Y si no veo bien que el otro tiene sus ojos, cómo pretenter que mire con los de uno?.
Otra cosa seria sería que uno quiera ver con los ojos propios y sa-ver como ven los ojos del otro....Ahi es bien distinto. Entonces se acerca uno y pregunta: Como es que miras esto o aquello?...y uno, que tiene ojos, y oídos, como muy bien habrá visto quien pregunta, también tiene boca, puede contestar. Pues mira, miro así o asá. Esto amarillo, esto verde, aquello azul. Ahhh mira vos !!! Y tu como miras? eso que tu ves amarillo lo veo naranja, esto que tu ves verde para mi es rojo, aquello que ves azul, azul.
Se vieron, escucharon, hablaron y quién sabe qué mas. Quizá hasta se re-cuerden. No se, habría que verlo bien.
Esferas al Buscador.
“En el antiguo Egipto la preocupación por la muerte y la resurrección es un tema central y permanente. Todas las inscripciones de las tumbas hablan de esa especie de obsesión por la continuidad tras la muerte” [1]
Paco me envía un mensaje: “me gustaría ir. ¿a qué hora termina? ¿me llevas?”. No se a que hora termina. Te gustaría ir, te llevo. Y el sábado, fuimos. Puntual pasó por casa. Salimos en dirección al Parque de Estudio y Reflexión La Reja, con Denis y Juan, a encontrarnos junto a otros amigos interesados en dedicar su tiempo a temas tan aparentemente improductivos como inspiradores como ver un video que no sabes con certeza, al menos intelectual, de qué va, ni con cuántos ni con quiénes pero qué "huele" muy bien.
Charlatán con los temas trascendentales del video y los intercambios cuasi delirantes que nos habían surgido bajó del auto saludando con la mano desde afuera, prometiéndonos quién sabe cuando nos volveríamos a ver. Así es nuestra amistad.
Paco estudió sociología, trabajaba con las comunidades originarias, oriundo del norte argentino, activo discípulo y guía en la escuela del “Cuarto Camino”[2], un buscador, pero sobre todo, si es que hay virtud mayor, un Ser en nada indiferente al dolor del prójimo. Todo lo contrario.
Hacia mediados de setiembre de 2010, Paco lee en los diarios que Silo [3] había dejado este mundo. Aunque no había llegado a conocerlo personalmente, en su plena adolescencia supo que un extraño personaje nombrado Silo, habló "a las piedras". En ese minuto se descubre conmovido “por la aún mas extraña coherencia que reconoce en la conducta de Silo a través de los años” según sus palabras; entonces decide encontrar donde acercar su saludo fraterno. Pensó, sintió y es lo que hizo. Nos buscó por internet y al día siguiente apareció en la Salita de El Mensaje de Silo en Almagro donde nos habríamos de conocer. Este es Paco para mí.
Pocos días después visitamos juntos por primera vez el Parque La Reja para compartir la Celebración Estacional de Primavera envueltos en una tarde soleada de animada charla nutrida de saludos, amigos y miradas.
Anoche, al llegar de la Salita donde podía aparecer Paco cualquier viernes, cuando querría, recibo un mensaje: “Paco había partido. Mañana sería la despedida.” Mi respuesta interrogante a Maricarmen me devuelve más detalle de la sorpresiva noticia. En ese primer momento le doy mi agradecimiento por comunicarnos, por haberme tenido en cuenta, que pido por sus seres queridos pero que no iba a ir. Yo no conocía a nadie. Ni a Maricarmen.
Entrada la noche, en el silencio de la almohada, viene a mi la imagen vívida de Paco. De pronto, como si lo hubiera olvidado detrás de tantas otras historias más recientes, surge colorida la película de como nos conocimos!. ¿Como que no iba a ir? El tampoco me conocía cuando decidió acercar su presencia en tiempos de transformaciones definitivas. ¿Que menos podia hacer! Por vos y por mi. Y agradecí tanto como se puede agradecer el haberme despertado justo cuando me estaba por dormir…....
En el lugar pactado, a pesar de la lluvia intensa, con Mariana, una de sus hijas, Alfonso, su yerno y sus dos nietitas, nos fuimos encontrando; éramos una cantidad de historias de todos los tamaños y destellos como entretejidos por un centro, formando quiza desde las alturas un abrigado poncho salteño o tal vez el aletear de un batará gigante como guiño a nuestro amigo.
A la hora precisa, en ronda, con la disposición de Mariana, Alfonso y de todos, navegamos la espiral sucesión del tiempo con esta historia que, como la presencia de cada uno de nosotros, evidenciaba por sí misma la misteriosa continuidad de los actos humanos. De Silo, su Mensaje, en la resonancia de la Ceremonia compartida, convencida que si los sentimientos tuvieran sonido, él estaría volando al compás de esta sinfónica.
Entre abrazos y agradecimientos nos despedimos conectados hacia el futuro.
Gracias Paco [4] por la enseñanza de tus gestos fraternos. El mejor de los Encuentros para vos, buscador.
“En las representaciones del antiguo Egipto la balanza siempre se representaba equilibrada. Eso significaba que las acciones habían sido buenas, por tanto las vísceras eran ligeras como una pluma. Entonces, el difunto podía pasar. Era un modo de presentarse ante los Dioses y asegurarse poder alcanzar la otra vida”[5]
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[1] Texto del audio del Video “Antecedentes de la Disciplina Material en Egipto” de Eduardo Gozalo, Alvaro Orus, Juana Perez que vimos el 7 de junio de 2014 en el Parque de Estudio y Reflexión La Reja, Buenos Aires.
[2] Disciplina fundada por G. I. Gurdjieff, que tiene como finalidad una totalidad armónica del hombre en base a un sistema de desarrollo que involucra simultáneamente; El cuerpo físico, el aspecto emocional y su centro intelectual, hacia el despertar de la conciencia.
[3] Silo es el seudónimo de Mario Luis Rodríguez Cobos. Nació en 1938 en los alrededores de Mendoza, lugar emplazado entre Argentina y Chile. Silo dejó este tiempo y este espacio el día 16 de septiembre de 2010. Sus escritos han sido traducidos a numerosos idiomas y están editadas sus Obras Completas en dos volúmenes.
[4] La última publicación de Paco Albarracín en Fb dice: “The Mission: Cada uno tiene la suya, hay que descubrirla y luego, atreverse”. Paco dejó este tiempo y este espacio el día 18 de junio de 2014.
[5] Idem nota 1.
Paco me envía un mensaje: “me gustaría ir. ¿a qué hora termina? ¿me llevas?”. No se a que hora termina. Te gustaría ir, te llevo. Y el sábado, fuimos. Puntual pasó por casa. Salimos en dirección al Parque de Estudio y Reflexión La Reja, con Denis y Juan, a encontrarnos junto a otros amigos interesados en dedicar su tiempo a temas tan aparentemente improductivos como inspiradores como ver un video que no sabes con certeza, al menos intelectual, de qué va, ni con cuántos ni con quiénes pero qué "huele" muy bien.
Charlatán con los temas trascendentales del video y los intercambios cuasi delirantes que nos habían surgido bajó del auto saludando con la mano desde afuera, prometiéndonos quién sabe cuando nos volveríamos a ver. Así es nuestra amistad.
Paco estudió sociología, trabajaba con las comunidades originarias, oriundo del norte argentino, activo discípulo y guía en la escuela del “Cuarto Camino”[2], un buscador, pero sobre todo, si es que hay virtud mayor, un Ser en nada indiferente al dolor del prójimo. Todo lo contrario.
Hacia mediados de setiembre de 2010, Paco lee en los diarios que Silo [3] había dejado este mundo. Aunque no había llegado a conocerlo personalmente, en su plena adolescencia supo que un extraño personaje nombrado Silo, habló "a las piedras". En ese minuto se descubre conmovido “por la aún mas extraña coherencia que reconoce en la conducta de Silo a través de los años” según sus palabras; entonces decide encontrar donde acercar su saludo fraterno. Pensó, sintió y es lo que hizo. Nos buscó por internet y al día siguiente apareció en la Salita de El Mensaje de Silo en Almagro donde nos habríamos de conocer. Este es Paco para mí.
Pocos días después visitamos juntos por primera vez el Parque La Reja para compartir la Celebración Estacional de Primavera envueltos en una tarde soleada de animada charla nutrida de saludos, amigos y miradas.
Anoche, al llegar de la Salita donde podía aparecer Paco cualquier viernes, cuando querría, recibo un mensaje: “Paco había partido. Mañana sería la despedida.” Mi respuesta interrogante a Maricarmen me devuelve más detalle de la sorpresiva noticia. En ese primer momento le doy mi agradecimiento por comunicarnos, por haberme tenido en cuenta, que pido por sus seres queridos pero que no iba a ir. Yo no conocía a nadie. Ni a Maricarmen.
Entrada la noche, en el silencio de la almohada, viene a mi la imagen vívida de Paco. De pronto, como si lo hubiera olvidado detrás de tantas otras historias más recientes, surge colorida la película de como nos conocimos!. ¿Como que no iba a ir? El tampoco me conocía cuando decidió acercar su presencia en tiempos de transformaciones definitivas. ¿Que menos podia hacer! Por vos y por mi. Y agradecí tanto como se puede agradecer el haberme despertado justo cuando me estaba por dormir…....
En el lugar pactado, a pesar de la lluvia intensa, con Mariana, una de sus hijas, Alfonso, su yerno y sus dos nietitas, nos fuimos encontrando; éramos una cantidad de historias de todos los tamaños y destellos como entretejidos por un centro, formando quiza desde las alturas un abrigado poncho salteño o tal vez el aletear de un batará gigante como guiño a nuestro amigo.
A la hora precisa, en ronda, con la disposición de Mariana, Alfonso y de todos, navegamos la espiral sucesión del tiempo con esta historia que, como la presencia de cada uno de nosotros, evidenciaba por sí misma la misteriosa continuidad de los actos humanos. De Silo, su Mensaje, en la resonancia de la Ceremonia compartida, convencida que si los sentimientos tuvieran sonido, él estaría volando al compás de esta sinfónica.
Entre abrazos y agradecimientos nos despedimos conectados hacia el futuro.
Gracias Paco [4] por la enseñanza de tus gestos fraternos. El mejor de los Encuentros para vos, buscador.
“En las representaciones del antiguo Egipto la balanza siempre se representaba equilibrada. Eso significaba que las acciones habían sido buenas, por tanto las vísceras eran ligeras como una pluma. Entonces, el difunto podía pasar. Era un modo de presentarse ante los Dioses y asegurarse poder alcanzar la otra vida”[5]
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[1] Texto del audio del Video “Antecedentes de la Disciplina Material en Egipto” de Eduardo Gozalo, Alvaro Orus, Juana Perez que vimos el 7 de junio de 2014 en el Parque de Estudio y Reflexión La Reja, Buenos Aires.
[2] Disciplina fundada por G. I. Gurdjieff, que tiene como finalidad una totalidad armónica del hombre en base a un sistema de desarrollo que involucra simultáneamente; El cuerpo físico, el aspecto emocional y su centro intelectual, hacia el despertar de la conciencia.
[3] Silo es el seudónimo de Mario Luis Rodríguez Cobos. Nació en 1938 en los alrededores de Mendoza, lugar emplazado entre Argentina y Chile. Silo dejó este tiempo y este espacio el día 16 de septiembre de 2010. Sus escritos han sido traducidos a numerosos idiomas y están editadas sus Obras Completas en dos volúmenes.
[4] La última publicación de Paco Albarracín en Fb dice: “The Mission: Cada uno tiene la suya, hay que descubrirla y luego, atreverse”. Paco dejó este tiempo y este espacio el día 18 de junio de 2014.
[5] Idem nota 1.
Ozono
Cuando estés harto del ruido, de la farsa, de tu propia hipocresía,
y te asuste el peso de vivirte cada día ensombrecido
Cuando digas Basta a la repetición absurda, al rídiculo maltrato
y clames por sentirte libre de toda carga por vez primera...
Entonces... tendrás un Propósito en el Silencio.
Que te acompañe la Entrega del que Confía
y escucharás el aleteo de la mariposa abrazarte,
olerás la tierra húmeda nutrirte
y el aire puro después de la tormenta encenderte.
y te asuste el peso de vivirte cada día ensombrecido
Cuando digas Basta a la repetición absurda, al rídiculo maltrato
y clames por sentirte libre de toda carga por vez primera...
Entonces... tendrás un Propósito en el Silencio.
Que te acompañe la Entrega del que Confía
y escucharás el aleteo de la mariposa abrazarte,
olerás la tierra húmeda nutrirte
y el aire puro después de la tormenta encenderte.
El viaje de la mariposa
Se abre vuelo aleteándome
Quiero…
No sé donde
Vuelo
La senda de tu perfume,
las huellas de tu aliento
lo fresco de tu risa
el calor de tu abrazo
el brillar de tus pupilas
Quieres…
Y allí te encuentro,
en el centro
real
muy despiertos
tan cerca de mi
Solo por diez días, cien
No te asustes, no te finjas.
Es cálido y suave
de tibias lenguas sanadoras.
Informe y salado
de frescas oleadas submarinas.
La plegaria de tu antiguo lamento
harta de morir, vivió.
Me buscabas;
Perfectamente imperfecto:
Ávido de amor,
Cruel de revancha victoriosa.
Tu sólida impotencia conmocionada
desheló en lágrimas,
tan agradecido, sin una palabra.
Sumergida en tus ganas de Ser,
te hice.
Desde mis adentros a toda la extensión
forjando amorosa, milagrosamente,
cada soplido hasta erguirte.
Amé extraer desde el centro mismo
para darte
Amé beber otras divinas fuentes
para nutrirte
Amé.
Apretado a mí con todas tus fuerzas,
resplandeció desde abajo tu mirada de cielo
otros diez días (si, no, no mas)
Esfumada tu memoria ni de cenizas
mas allá de vos, tu sorpresa y tu sospecha,
al suave pulsar intenso
de los giros que me nacen
circulé tu sangre mía
hasta extasiado embriagarte
en su blanca dulce tibiez,
uno derramarnos.
Abrumado, perplejo,
ya bien presente la memoria
hoy al menos con cenizas
no castigues ni culpes...
tu guardia, enfurecida
Cumplida tu plegaria
de nuevo tan estéril
al gran apolíneo de tu alma
Tanto
no sabía que podía entrar tanta belleza en mi contigo
como la cierta poesía y la verdad del mito,
tantas esencias, sutiles y vitales
y querer dártelas todas, todas
incondicionalmente
momento a momento
vaciándome, deshaciéndome
momento a momento
ahora que es siempre el mejor instante
para surgir nuevamente llena de vos conmigo
aqui y alla, regándonos
ahora y despues, amándonos
momento a momento
Sera
Será que todo mi cuerpo extraña respirarte....
como todo mi ser te quiere
Será que despues de la noche inmensa en el desierto sin estrellas
brotó del centro un manantial que para mi desconcierto y gratitud
volvió en circular movimiento.
Sin porques ni cómos ni para qués
entregué todos mis alientos futuros
en ese mismo y hondo suspiro
fundiéndome
De nuevo aquí, de nueva aqui,
aún resistida
queriendo ser
buscando
mas aca , mas allá,
te encuentro para encontrarme
en ese circular movimiento
que ansiadamente me acerca
a Uno
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